Tanto niños como adultos pueden tener problemas para pronunciar correctamente el fonema /r/. Esta es uno de los sonidos más difíciles de adquirir y por tanto de las últimos en aprender a pronunciar. Por ello, no pronunciarla correctamente no se considera algo preocupante hasta que el niño no tiene los 6 años
Cuando surgen problemas para pronunciar la “r” se le llama rotacismo, es el nombre que se le da a la dislalia selectiva del fonema “r”.
Una dislalia es una incapacidad para pronunciar correctamente ciertos sonidos o grupos de sonidos.
La dificultad para pronunciar la letra “r” suele ser pasajera, por eso es una de las últimas en adquirir, pero se corrige a medida que el niño va practicando el habla y afinando la audición.
¿Por qué tiene problemas para pronunciar la “r”? Te lo contamos…
El rotacismo no se debe a un problema de retraso congénito ni psicológico. El uso prolongado del chupete puede ser un precedente acusando debilidad en la musculatura, así como a un mal patrón o modelo articulatorio de los niños, por parte de padres, hermanos, o personas de su entorno que también tenga algún problema para pronunciar la “r”. Matizar que los niños aprenden los sonidos por imitación, con lo que es muy factible que pronuncie como lo hacen sus mayores.
En muchos casos, se debe a una mala colocación de la lengua y del aire, haciendo que el sonido no se emita de la forma adecuada. El niño no coloca la lengua donde hay que ponerla al pronunciar el sonido «R», y no sopla como debería hacerlo.
Otra posibilidad es que exista un problema físico que impida la emisión de ciertos sonidos, como frenillo sublingual, hendidura del paladar o tal vez hipoacusia. Antes de comenzar con un tratamiento es importante conocer la causa del rotacismo para saber qué camino seguir.
La “r” es un fonema cuyo sonido se consigue haciendo vibrar la punta de la lengua contra el paladar. El problema radica en que el niño no sea capaz de hacer vibrar correctamente la lengua y hay que enseñárselo.
Puede haber problemas para pronunciar la vibrante simple (“r” suave) o múltiple (“rr” fuerte”). A su vez hay diferentes clases de rotacismo, dependiendo del lugar y modo de pronunciar el sonido. Puede ser labial, lingual o velar (“r” francesa)
Desde Peroca abordamos esta dificultad dependiendo de las necesidades de cada caso. En mayor o menos medida, todos estos ejercicios son necesarios para conseguir la vibración de nuestra lengua.
✴️ Tonificar la musculatura: activamos toda la musculatura de nuestra lengua, labios y mejillas para poder colocar con precisión la lengua en su punto articulatorio correcto.
✴️ Movilidad: jugamos a mover lengua, labios y mejillas. Así tendremos mayor control y conciencia de nuestros órganos y será fundamental para conseguir movimientos precisos.
✴️ Respiración: jugamos con nuestra respiración para aprender a controlar el aire que inspiramos y expulsamos por la boca. Podremos así, conseguir soplos de diferentes potencias, lo que será de gran ayuda para alcanzar la vibración de nuestra lengua.
✴️ Coordinación fono-respiratoria: se trabajará la coordinación de nuestra respiración con las diferentes posiciones de nuestra lengua, labios y mejillas para producir el sonido deseado.
✴️ Trabajar de forma lúdica: Es importante hacerlo siempre desde el juego y desde gran variedad de perspectivas, son ejercicios muy repetitivos y pueden resultar pesados. Con ello conseguiremos mantener siempre activa las ganas de conseguir el objetivo que nos proponemos.
✴️ Práctica: la práctica en casa es muy importante para poder reforzar todo lo que se hace en las sesiones y además cuánta más veces se repita, mayor será la asimilación y generalización del movimiento necesario para que se produzca la vibración.
¿QUIERES CONOCERNOS? AQUI
VISITA NUESTRAS REDES SOCIALES PARA VER TODO LO QUE HACEMOS AQUI